Empieza preparando los muslos. Retira la piel y el exceso de grasa.
Retira el hueso central y el cartílago. A continuación, corta el pollo en trozos.
Ponlo en un cuenco y añade una o dos cucharadas de pimentón en polvo, media cucharadita de ajo en polvo (no de sémola), sal, pimienta y especias al gusto.
Mezclar bien. Aplasta los copos de maíz en su bolsa con un rodillo.
Bate un huevo en un cuenco y sumerge en él los trozos de pollo uno a uno.
Cuélalo en los copos de maíz colocados en un recipiente y empanízalo lo mejor que puedas presionando un poco el pollo en los copos de maíz.
Para el aceite, puse un poco en una pequeña botella con pulverizador. Pero también puedes aplicar el aceite con un pincel para no usar demasiado.
Rocía el pollo con el aceite o píntalo un poco. Coloca el pollo en una bandeja de horno forrada con papel de horno.
Hornea durante 20 minutos a 180°C, dando la vuelta a los trozos a mitad de cocción.
Para la salsa, mezcla todos los ingredientes en un bol o directamente en la sartén.
A continuación, cuece durante 2 minutos a partir de la ebullición. La harina de arroz da a la salsa una buena cobertura.
Moja los trozos de pollo en la salsa, o úntalos con un pincel de cocina.
Disfrútalo enseguida, espolvoreado con semillas de sésamo si quieres.